diciembre 17, 2008

Rodaje



“Girando, en círculos perfectos, siempre contra las agujas saltando de cabezas. Algo se alejó del sueño, algo se abrazó a las hierbas”.

Cobijado entre sus piernas ruega no tener que salir.
Rozando sus mejillas piensa en no volver.
Ella, sabe la broma del destino por venir,
sus retinas se desbordan, no puede ignorar lo que sucederá.
Entre risas y humo componen melodías acabadas,
pasiones sin sentidos, sentidos sin pasiones.
Callan.
Rutinan el pasado, seguros del futuro
Besos, caricias improvisadas.

¡¡Corten!!



Rumores, gritos, “make-up”
Detrás; se dirigen a sus vestidores.
Ella, arregla sus pestañas de cartón.
El, aún con el maquillaje elige recitar.

¡¡Acción!!



Caminan, corren se abrazan,
lloran, escapan, algo los vuelve a encontrar.
Improvisan alguna que otra vez
rostros de felicidad.

¡¡Corten!!



Ha terminado,
Cortar - Pegar.
No queda más por hacer,
Ella ya no sabe.
Siente lo que sucederá...

diciembre 10, 2008

Ritual



Inhala-exhala

Inhala-exhala

Inhala-exhala







notas de humo envuelven su mirar





Inhala-exhala





círculos blancos se dibujan en el mar






Inhala-exhala






Final: sabe que en algún momento va a terminar






Inhala-exhala





Inhala-exhala





Sólo hace falta saltar ... saltar y terminar






Inhala-exhala






¿Para qué esperar?






Inhala-exhala







Si ya puedes empezar a cavar








Inhala-exhala






Toma las cenizas, conviértelas en nubes... y salta ya.






Inhala-exhala...

- exhala.

noviembre 17, 2008

Tonada del ayer



Con las manos desgarradas ella camina por el ocaso, observando
cómo entre las tinieblas se dibujan sombras de bufones abatidos de dolor,
algo en su mirada escribe sus ansias de que vengan a buscarla
Tal vez sienta arrepentimiento, tal vez no, pero no dice nada, silencia.
Prepara el almuerzo, sonríe a sus hijos y sale a trabajar,
torrentes de lluvia azotan los confines de su alma.
Agudiza sus sentidos al recorrer la ciudad buscando respuestas
o posiblemente alguna pregunta a la que saber contestar.
Árbol que camina y escribe vidas al pasar, de pié,
fusionado entre hierbas y polvo, regalando frutos con sabor a soledad.
Se asoma por entre los cristales del mundo,
limpia con su vestido sus anteojos y se ve niña,
imaginando un futuro, entre rosas, altares y príncipes.
se siente caer.
En su interior sólo hay ecos de aquello que espero ser
Ni azul, ni blanco, ni verde: negro.
Negro ensordecedor que contornea su alma desgastada.
Regresa a casa, prepara la cena, sonríe a sus hijos y recuesta su cuerpo.
Ya no suspira al pensar en mañana.
Hoy… le preocupa el ayer.

noviembre 14, 2008




Te crucé en un escalón, de no muchos más, y empezamos a caminar:






canciones, viajes, lecturas…




un devenir constante en muñequitos de plastilina




Biblia, muerte, “el otro”, la nada…




una melodía de sueños, de instantes por compartir;




algo más de 100 líneas por contar…




hojas en blanco que esperan ser manchadas de tinta;





Brujas, fantasías, cuerpos, órganos…




llamas que el viento con un soplo espera encender




desvelos, sesiones, sonrisas…




conociendo los ojos de la vida… sólo buscando ser, allí te encontré.






(de Ami a Ami)

noviembre 13, 2008



Las traslúcidas manos del judío
labran en la penumbra los cristales
y la tarde que muere es miedo y frío.
(Las tardes a las tardes son iguales.)
Las manos y el espacio de jacinto
que palidece en el confín del Ghetto
casi no existen para el hombre quieto
que está soñando un claro laberinto.
No lo turba la fama, ese reflejo
de sueños en el sueño de otro espejo,
ni el temeroso amor de las doncellas.
Libre de la metáfora y del mito
labra un arduo cristal: el infinito
mapa de Aquel que es todas Sus estrellas.


Jorge Luis Borges.

noviembre 11, 2008

Retrato de una madrugada




Allí donde los cuerpos despiertan por la noche,
ya no quedan más gemidos,
el desenlace del crepúsculo los ha consumido al compás de un cigarrillo.

Pieles que rozan el hastío,
almas que dan la espalda para no ver,
encendedores encendidos
que estallan en sábanas de papel…

Detalles, no más que algunas fotos para no olvidar, inscripciones en la pared a las que seguro ayer querrás borrar; fantasmas color rojo punzante q ríen sin parar.

Silencio. Alguien calla a lo lejos… la tarde ha sido demasiado larga, quizás sea hora de despertar.

11/11/2008

noviembre 09, 2008

Bifurcaciones




Te busqué orillado, hablamos de la muerte y apelaste al Ser. Aquellas frías tardes me hablaban de soledades… soledades compartidas…

-¿que pensás?... -no mucho.

Sin más que decir, mataste el cigarrillo y sacaste lapicera y papel; yo con dudas lo firmé, quizás porque triunfó la incorrecta, la que no quería saber que aquel papel llevaba fecha de defunción.

Una explosión, un escape, una línea de fuga, como gotas que buscan solo ser… Compartiendo autores, desterritorialidades, potenciando una composición…

Sólo cuerpos sin órganos que pronto vuelven a ser cuerpos, que componen instantes, sin pasado ni futuro. Sin ser… con muerte.

Puede que pueda… si no somos más que afueras que se cruzan…

25/06/08

In-fin…



Y quizás no tengamos más noches

Quizá sólo existan soledades q amanecen una y otra vez

Tal vez ebulla aquel silencio al que hicimos callar tantas veces,

y las velas encendidas reflejen la sombra de tu ausencia.

Suspiras a la niñez de mañana que ha quedado atrás

Resentido por aquello que se previsionó

Desatas euforia colectiva de dolor asexuado

Tal vez- por eso- no tengamos más noches

Sin dolor estremecido,

seguro de recordar lo que va a venir,

buscas en el placar “acuerdos de caballeros”,

que nunca han de llegar.


¿Caminamos? Invitó ella. Él asintió. Recorrieron la ciudad por una hora, quizás dos.

-¿Volamos? Preguntó él. Ella recostó su cuerpo sobre las hierbas. Las cosquillas del rocío le produjeron un dulce escalofrío que la hicieron estallar en carcajadas…

¿Y si nos vamos lejos? Propusieron los dos al unísono y cerraron los ojos.

Las estrellas parecían desvanecerse y ella empapada de lágrimas decidió hablar.

-¿Volar? ¿Ir lejos?... como si tal cosa fuera posible para un alma sin rumbo. Imposible.

Él la oyó en silencio, sin interrupciones. Le costaba comprender lo que Amanda decía.

Y ella prosiguió. – Hay cosas que no duelen, lastiman… que no cortan, hieren pero eso el cielo nunca lo comprenderá.

El viento rozó sus cabellos. Ella recordó las cosquillas del rocío, el escalofríos y (con nostalgia) las carcajadas. Y decidió que era el momento de callar.

Algo estallaba cerca, un estruendo enmudeció el silencio. Ya no quedaba nada por decir.

Él no preguntó. -Mejor mañana, dijo.

Amanda ya no sentía frío, ya no veía el cielo, como pudo, tomo una ramilla y entre las hierbas escribió: TARDE… sólo lloró un poco y luego, echó a correr…

09/11/2008 09:56:40 p.m.


noviembre 06, 2008

Luciérnagas

Las luces se cerraron, hasta las penumbras se durmieron… allí fue donde la encontró. A pesar – o por- todo podía verla; estaba ahí, tan escondida, acurrucada, casi en posición fetal. Creyó que tenía miedo. ¿Miedo a qué?

Trató de explicarle, ya no había de que temer.

Después de todo, para todo es tarde. Ya no hay nada por hacer. Sólo sumergirse en esa inmensidad que muchos llaman tiempo.

Donde está? Casi sin darse cuenta se desvaneció, creyó q las voces que se oían desde lejos y los celulares la apabullaron. Quiso verla. Le ahogó se ausencia. Ahora que la vio siente necesitarla.

Que está sucediendo? Agujeros, círculos vacíos…. NADA, sólo el llanto de un niño le recuerda que está viva, o por lo menos, que posee masa muscular recubriendo sus órganos.

A pesar –o por- todo es una hermosa sensación…

06/08/08